Los activos representan la partida contable que refleja los bienes y derechos que poseen una entidad económica ya sea unipersonal o sociedad a una fecha determinada.
Estas cuentas junto con los pasivos y el capital integran el Balance General o Estado de Situación Financiera permitiendo determinar el patrimonio contable y con ello la salud financiera de una entidad económica.
Las cuentas de activo describen de manera detallada los bienes y derechos de una empresa, siendo el activo el primer rubro a determinar en el estado financiero del Balance General, clasificándose en activo corriente y no corriente, no obstante, se pueden desprender otros subgrupos según la naturaleza del activo.
Contenidos de este artículo
Activos Corrientes
Se encuentran representados por aquellos bienes y derechos que posee la empresa y que pueden convertirse en efectivo en un periodo no mayor a doce meses; estos también se conocen como activos circulantes y su vez se clasifican en los siguientes subgrupos:
Activos disponibles:
Están constituidos por efectivo y equivalente en efectivo, el cual representa el dinero existente en caja, caja chica y bancos necesario para llevar a cabo las actividades ordinarias de la entidad, manteniéndose en constante circulación.
Activos exigibles:
Representado por las cuentas por cobrar a corto plazo, inferiores a y año; ya sean de clientes, empleados, accionistas u otros.
Activos realizables:
Están conformados por los inventarios de mercancías destinados para la venta, tanto de productos en proceso como ya elaborados; los cuales son de fácil liquidez; es decir, se convierten rápidamente en dinero al venderse en un corto plazo.
Activos diferidos:
Corresponde a aquellos activos cuyo pago es realizado por la empresa de manera anticipada, por lo general este tipo de activos corresponde al pago de gastos, como alquileres pagados por anticipado.
Activos corrientes
Son aquellos activos que se encuentran constituidos por los bienes y derechos que se encuentran de manera fija en la empresa por un lapso superior a un año; por ende, carecen de liquidez inmediata, estos activos no corrientes también son conocidos como activos no circulantes.
Inversiones a largo plazo:
Son todas aquellas inversiones efectuadas por la empresa distintas a las actividades ordinarias de la entidad con el fin de obtener un retorno futuro de la inversión en un plazo superior a un año; tales como inversiones en acciones, bonos de deuda, u otros.
Activos fijos tangibles:
Son aquellos activos que se encuentran representados por propiedad, planta y equipos; los cuales son bienes que no están destinados para la venta, sino que se mantienen fijo por ser activos necesarios para llevar a cabo las actividades operacionales, tales como edificios, terreno, local comercial, maquinara, equipos, entre otros.
Activos fijos intangibles:
Constituyen aquellos bienes y derechos que posee la empresa durante largos plazos, pero que no tienen una estructura física, como marcas de fábrica, patentes, derechos de autor o similares.
Depreciaciones y amortizaciones acumuladas:
Son cuentas reflejan la pérdida de valor que sufren los bienes de la entidad con el desgaste por el uso o a través de los años, disminuyendo el valor del activo de manera acumulativa y progresiva.