La compra impulsiva o espontánea se refiere a la adquisición de productos que se realizan sin haberlas programado y sin premeditación. Por lo general, son aquellos productos que tienen precios bajos que incentivan el deseo, ya que no trata de necesidad, sino de satisfacción.
Cuando un producto se compra de manera impulsiva, mayormente no se trata de un producto de primera necesidad, por lo tanto, este tipo de compra es considerado como un impulso de interés comercial y publicitario.
En tal sentido, es bastante sencillo cómo se lleva a cabo el procedimiento de este tipo de compras precipitadas, ya que se basa en la visualización de un atractivo producto y tener la tentación y el deseo de adquirirlo.
Debido a que las compras impulsivas conducen a la tentación y a las compras imprudentes que no se han planificado, es necesario tener en cuenta algunos factores que ayuden a mejorar esta situación, ante la competencia del mercado y a las persistentes campañas publicitarias que viven tentando al consumidor.
Es por eso que a continuación, se mostrarán algunos consejos que permiten evitar la tentación y caer en este tipo de compras:
- Cuando el precio del producto cumple con el objetivo de ahorro, sería excelente gratificarse, sin embargo, en algunas ocasiones se debe pensar muy bien si la compra del producto vale la pena después de un esfuerzo de haber lograr ahorrar una cantidad de dinero.
- Al saber cuál es el producto que se quiere comprar por impulso, es importante averiguar si en el mercado hay otro producto parecido y analizar el potencial que tiene y de esa forma confirmar si realmente es un buen producto y si verdaderamente es necesario.
- Otra opción es investigar si el producto deseado, se encuentra en un mercado de segunda mano y las condiciones en que se encuentra, es posible que al tratarse de un producto que no sea imprescindible, no sea necesario invertir tanto dinero de los ahorros que sirven para otras cosas que son realmente necesarias.
Ejemplos de compra impulsiva
- La compra impulsiva se refiere a todo aquello que se obtiene sin ningún tipo de planificación previa y de manera inesperada por motivos de impulso emocional.
- Las compras impulsivas son consideradas como las compras que realizan los consumidores sin haber tenido la intención de hacerla antes de entrar al comercio.
- Cuando se compra por impulso no se tiene en cuenta la función o rentabilidad del producto, ya que no se basa en consumir lo necesario, sino comprar lo deseado.