La marca propia hace referencia a aquellos productos que están patentados bajo el signo distintivo del comercio mayorista o minorista que los distribuye, ya sea este el nombre del local en si o alguno que lo identifique como propio, para así, mantener cierto control en la red de comercio en el cual se especializan al llevar su nombre e influencia a cada cliente.
Ciertos especialistas en el área exponen que las creaciones de la marca propia por parte de comerciantes se llevan a cabo para introducir en el mercado productor que los identifique, aumente su renombre y fidelidad por parte de los clientes para el negocio en sí.
Cabe destacar que uno de los factores más relevantes al momento de llevar a cabo una marca propia es que no existe la necesidad de realizar grandes inversiones, debido a que estas son impuestas únicamente por distribuidores sin involucrarse en el proceso de fabricación.
Existen ciertos factores que influyen positivamente al momento de implementar una marca propia en el mercado y los cuales se recomiendan tener en cuenta al momento de incorporarse en este tipo de comercialización.
Dentro de los puntos más importantes al implementar una marca propia se encuentra el precio, resulta sumamente favorecedor ofrecer al cliente valores que atraigan su atención para así posibilitar que este consuma y pruebe en primera instancia el producto que el comerciante busca distinguir entre el resto.
Debido a que el objetivo principal al ofrecer un producto con marca propia es que este resalte, entonces, el diseño con el cual se presente, sin duda, será un aliado muy fuerte para lograr el objetivo. Resulta importante buscar un diseño original, fuera de imitaciones a marcas populares.
Como tercer factor, pero no menos importante se encuentra la calidad del producto, a pesar de que el comercio distribuidor no es el mismo que se encarga de la fabricación, si resulta importante ofrecer productos que cumplan con ciertos estándares de calidad para así resaltar positivamente en el marcado.
Ejemplos de marca propia.
- El implemento de una marca propia por parte de comercios mayoristas y minoristas sin duda es una de las herramientas más efectivas para crear un cierto renombre entre los clientes.
- El factor deseo para la comercialización de una marca propia es sumamente importante, por lo cual crear un producto atractivo para el cliente es uno de los objetivos principales.
- La implementación de la marca propia remonta sus orígenes a finales del siglo XIX en Reinos Unidos.